La Consejería de Sanidad y Consumo ha dado un paso más en su propósito de hacer de Ceuta una ciudad cardioprotegida. Ha entregado un desfibrilador semiautomático al Área de Coordinación de Emergencias (ARCE)-Protección Civil, que depende de la Consejería de Presidencia, Gobernación y Empleo.
Este aparato sirve para dar una respuesta inmediata ante problemas cardíacos como paradas, taquicardias y fibrilación ventricular y, como ha subrayado Abdeselam, su empleo en los diez primeros minutos de aparición del problema permite, en la mayoría de los casos, salvar la vida del aquejado.
El desfibrilador semiautomático es de fácil manejo y guía los pasos a seguir por medio de señales acústicas y visuales. Además, el personal de ARCE-Protección Civil, que lo incorporará a su unidad móvil, ha recibido formación específica por parte de Cruz Roja.
Los polideportivos Díaz Flor y Guillermo Molina, el Parque Marítimo, la Estación Marítima, el Teatro Auditorio del Revellín, el centro comercial Parques de Ceuta y ahora también la unidad móvil de ARCE-Protección Civil disponen de desfibrilador, un aparato que próximamente Sanidad llevará, también, al Campus Universitario.
En el acto de entrega de hoy han estado la consejera de Presidencia, Gobernación y Empleo, Yolanda Bel, y el responsable de ARCE-Protección Civil, Alejandro Vargas. Ambos han agradecido a la Consejería de Sanidad y Consumo su atención.
La desfibrilación temprana
Cada año se producen en España unas 25.000 paradas cardíacas y ocasionan cuatro veces más muertes que los accidentes de tráfico. La Estrategia de Cardiopatía Isquémica del Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud recoge que la desfibrilación temprana es un elemento fundamental en el ámbito de la asistencia a pacientes con enfermedades cardiovasculares. De hecho, esa Estrategia contempla entre sus objetivos ofrecer asistencia in situ con capacidad de desfibrilar en el menor tiempo posible.
No es para menos teniendo en cuenta la experiencia acumulada en las unidades de cuidados intensivos, que demuestra que la efectividad de la desfibrilación temprana en la recuperación de un ritmo cardíaco eficaz es del 90% cuando es posible efectuar la desfibrilación en el primer minuto de evolución de la de la fibrilación ventricular (FV). Esta efectividad disminuye muy rápido: por cada minuto de retraso se reduce la supervivencia entre un 7% y un 10%, de forma que las posibilidades de sobrevivir transcurridos 10 minutos son mínimas.