La Consejería de Sanidad y Consumo ha puesto en marcha la campaña Proteger tu salud está en tus manos, que incluye carteles, trípticos y abanicos de papel informativos con recomendaciones para prevenir los efectos del exceso de temperatura.
Beber con frecuencia agua aun sin tener sed, comer de forma ligera, aumentando la ingesta de frutas y verduras, no realizar deporte ni trabajos pesados en los momentos de más calor, entre las 12.00 y las 16.00 horas, cuando, además, hay que evitar la exposición al sol; utilizar gorras, sombrillas y cremas protectoras con factor 30 o más y vigilar a los niños y ancianos, colectivos de riesgo principales, son los mensajes que Sanidad lanza en el material editado para recordarnos cómo disfrutar del verano de manera saludable.
Esta campaña preventiva está dirigida a la ciudadanía en general y a los profesionales sanitarios en particular, el material también incluye aquellos síntomas a los que deben prestar especial atención durante los meses de verano.
En 2011, como recoge la memoria del Plan de prevención del efecto del exceso de temperaturas sobre la salud que desarrolló Sanidad y Consumo, el protocolo de actuación fue consensuado con el Ingesa, la Delegación del Gobierno, la Comandancia General y otros organismos e instituciones, como Cruz Roja y las residencias Nazaret y Nuestra Señora de África, para así llegar al máximo de población posible.
De la misma manera se actuará este año, cuando las temperaturas umbrales establecidas para Ceuta son 22 grados de mínima y 33 de máxima. En 2011, el umbral máximo fue superado en cuatro ocasiones. La temperatura máxima registrada fue 38,6 grados, que es lo que marcaron los termómetros el 8 de agosto.
Sin embargo, la coordinación entre las distintas instituciones y entidades en materia preventiva y de actuación contrarrestó esos excesos y, por ejemplo, solo se registró una asistencia por patologías relacionadas con las altas temperaturas: la de un joven que presentaba hiperglucemia que hubo de ser atendido en el Hospital Universitario. Este fue el nivel más bajo de asistencias por patologías relacionadas con el calor que se ha dado desde que se activó el protocolo de actuación.
Parte del trabajo realizado en el marco de esa coordinación entre instituciones y entidades, que de nuevo este año se ha puesto en marcha, lo constituyen las charlas y sesiones informativas llevadas a cabo con las Brigadas Verdes de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, los usuarios del Centro de Servicios Sociales del Polifuncional del Príncipe y de Benzú.
Además, desde Sanidad y Consumo se hicieron llegar las recomendaciones, consejos y advertencias relacionados con el exceso de calor en la salud a los centros sanitarios de las diferentes instituciones civiles y militares tanto de carácter público como privado. Esa acción que recoge la memoria de 2011 se repite este ejercicio.
Efectos concretos del exceso de temperatura en la salud
Los calambres, los golpes de calor y el agotamiento por culpa de las altas temperaturas son los casos específicos de los que advierten los trípticos editados por Sanidad, que explican cómo reconocer esas situaciones y cómo actuar ante ellas.
Así, ante los calambres, desde Sanidad y Consumo, la recomendación que lanzan es descansar en un lugar fresco, hidratarse, ingerir alimentos ricos en sal, no realizar actividades extenuantes en varias horas y, si transcurrida una el dolor no se atenúa, buscar atención médica.
En caso de insolación, que se traduce en síntomas como pulso rápido, dolor de cabeza, mareos, náuseas e incluso pérdida de conocimiento, el consejo es buscar ayuda médica y enfriar al paciente mientras llega el auxilio llevándolo a una zona de sombra e incluso sumergiéndolo en una bañera con agua fría o envolviéndolo en una sábana mojada para conseguir el mismo propósito: reducir la temperatura corporal, que en una situación así puede superar los 39 grados.
El agotamiento por calor, del que avisan una sudoración copiosa, palidez, calambres, mareo, descoordinación motora y cefalea, entre otros síntomas, hay que combatirlo con una rehidratación progresiva con bebidas refrescantes no alcohólicas, descanso en un ambiente con aire acondicionado y atención médica si, pasada una hora, el problema no remite.