La Consejería de Sanidad, Consumo y Menores iniciará a partir de mañana martes una nueva fase de la campaña de medición de la calidad del aire, que se realiza a través de un convenio de colaboración con el Departamento de Contaminación Atmosférica del Instituto de Salud Carlos III.
En concreto esta campaña incorpora como novedad la instalación de un analizador de aire en continuo, que estará funcionando los próximos 15 días, y que medirá los niveles de ozono. El miércoles se hará la toma de muestras de dióxido de nitrógeno -NO2- y de ozono -O3- en los 60 puntos en los que se han instalado captadores pasivos.
Es importante conocer el grado de concentración de ese compuesto químico y ese gas, en el caso del dióxido de nitrógeno, se forma en los procesos de combustión, por lo que es frecuente en zonas urbanas; y en lo que se refiere al gas ozono, es muy oxidante, provoca efectos inflamatorios, especialmente en sujetos asmáticos, y por acción directa disminuye la función pulmonar.
La Consejería ha querido agradecer también la colaboración de la empresa municipal Acemsa, por ceder las instalaciones en las que se colocará el analizador.
Esta es la segunda fase de la campaña de medición de la calidad del aire que se inició el pasado 30 de marzo. Entonces, Sanidad puso en marcha la fase de toma de muestras de las partículas PM2,5 y PM10, que se encuentran en el ambiente y que a la larga, si se produce una exposición prolongada, pueden producir problemas respiratorios, especialmente en niños.
Desde la Ciudad, y en el marco de las competencias atribuidas en materia de salud pública, que corresponden a la Consejería de Sanidad, Consumo y Menores, se llevan a cabo este tipo de campañas para examinar la calidad del aire que respiramos y comprobar que la concentración de partículas contaminantes no excede el límite establecido para la protección de la salud humana.
En 2015, la Ciudad realizó tres campañas de medición de la calidad de aire y dos en 2016.