La consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, se ha reunido hoy con representantes de los partidos de la oposición, de entidades sociales y de organismos estatales como el Imserso, el Ingesa, la Dirección Provincial de Educación y el Servicio Público de Empleo Estatal para comenzar a trabajar en la elaboración de un Plan Integral de Atención a la Discapacidad.
Este encuentro supone el punto de partida para el cumplimiento de un acuerdo plenario encaminado a la elaboración de un programa de atención a los discapacitados.
En la cita de hoy se ha marcado la metodología de trabajo, que pasa por el cumplimiento de tres fases. En primer lugar, el trabajo comenzará con la recogida de información por parte, fundamentalmente, de la Ciudad y el Imserso para determinar datos como la población con discapacidad o los recursos existentes en cualquier ámbito (educativo, sanitario, social...). A partir de ahí, se hará un estudio de las necesidades reales de las personas que sufren algún de discapacidad para, en una última fase, proceder a la elaboración de las propuestas de actuación que deberá desarrollar no solo la Ciudad, sino también los organismos estatales, en función de las competencias de cada administración.
El objetivo es que la primera de las tres fases esté materializada en un plazo de unos dos meses. Así, la intención es que en la primera quincena de febrero esté listo un documento en el que se recoja la población discapacitadas y lo recursos que existen actualmente para estas personas, que se presentará a los integrantes de este grupo de trabajo en una nueva reunión. Cumplido este paso, se comenzará a trabajar en las siguientes fases, en función de la metodología propuesta.
Las entidades sociales que hoy han estado presentes en la reunión han sido el CERMI, Cruz Roja y Cruz Blanca, pero la Consejería de Asuntos Sociales quiere incorporar a esta mesa de trabajo a otras organizaciones como la ONCE o las asociaciones de Fibromialgia y de Mujeres Mastectomizadas (ACMUMA).