Con los votos a favor del Partido Popular y de Caballas y la abstención del PSOE, el Pleno de la Asamblea ha aprobado de manera definitiva, y a propuesta de la consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, el Reglamento Regulador del Punto de Encuentro Familiar. El servicio es una vivienda acondicionada que se utiliza normalmente para cumplir con el régimen de visitas establecido por el juez tras un divorcio, aunque también en otras situaciones como en casos de violencia de género, los derivados por Servicios Sociales, Menores o el Centro Asesor de la Mujer o simplemente cuando una persona no quiere encontrarse con su ex pareja.
Proteger el interés de los menores, como objetivo principal, y la gratuidad del servicio, como principio más destacado, son aspectos que caracterizan este documento que regula las normas de funcionamiento y los recursos disponibles para la prestación de este servicio, que la Ciudad ofrece mediante un convenio con Cruz Roja y que supone un desembolso de 167.000 euros.
La entidad humanitaria, precisamente, ha sido quien ha fijado cuándo funcionará este servicio, que estará abierto martes y jueves por la tarde y los viernes y los fines de semana en horario de mañana y tarde. No obstante, la consejera de Asuntos Sociales se ha mostrado dispuesta a ampliar en función de las necesidades de uso.
El servicio sirve también para preparar a los padres para que consigan autonomía y puedan mantener las relaciones con sus hijos sin depender de este punto; para amortiguar las tensiones en las relaciones entre progenitores (muchas veces degradadas tras denuncias, juicios, incumplimientos de las visitas, órdenes de alejamiento...) y para detectar situaciones familiares que atenten contra los intereses del menor y dificulten su desarrollo integral como persona.