El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha sido distinguido hoy, en Algeciras, con la Ortiga de Oro, condecoración que concede cada año la Peña Cultural y Recreativa San Isidro y que le ha impuesto el alcalde algecireño, José Ignacio Landaluce. Vivas ha recibido esa condecoración como agradecimiento a la hospitalidad que profesa a los algecireños que se desplazan hasta Ceuta y por su continua voluntad de colaborar en el fomento del desarrollo de ambas localidades.
El acto se ha desarrollado en la sede de la Peña San Isidro, que está en el número 56 de la calle San Antonio y, en ediciones anteriores, han merecido la Ortiga de Oro todos los alcaldes de Algeciras del periodo democrático; periodistas como Carlos Herrera y Jesús Melgar, artistas como Paco Gandía, Josele y Tate Montoya; el ex presidente de la Junta de Andalucía José Rodríguez de la Borbolla; la ex alcaldesa de Cádiz Teófila Martínez; y el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, entre otros.
Vivas se ha mostrado "extraordinariamente" agradecido, ha negado tener méritos personales para llevar la distinción y ha prometido que defenderá la Ortiga de Oro. "El aire, como la ortiga, sabe y huele a mar", ha comenzado su intervención ante una sede a rebosar y en la que también ha recordado que el Estrecho no separa a Ceuta y Algeciras sino todo lo contrario, las une, como lo hacen, también, "el cielo, la luz, las pasiones y algo muy importante para los ceutíes, la misma patria".
Vivas también se ha confesado honrado de que Landaluce -el alcalde algecireño le ha elogizado por su gestión al frente de la Ciudad de Ceuta y lo ha puesto como ejemplo- y los miembros de la Peña San Isidro le hayan dado la oportunidad de poner de relieve "de nuevo" los vínculos que existen entre ambas ciudades, Ceuta y Algeciras. "Son esenciales", ha calificado el presidente esos lazos, de entre los que ha subrayado "la historia, el alma mediterránea, el carácter y la magia de ser ambas ciudades puente, un lugar de encuentro y de fusión único en el mundo".
"Nos unen los atardeceres de ensueño de estas dos orillas mágicas y únicas en el mundo; y las tradiciones, como el Carnaval, una sublime manifestación de cultura popular con mayúsculas", ha continuado. "Es diversión, es humor del bueno y sano, además de crítica, crónica, ingenio y sentimiento", lo ha ensalzado Vivas antes de hacer un reconocimiento a los artistas "notables" del Carnaval de ambas orillas por saber expresar de esa manera su "amor" a la tierra. "A ellos mi más sincero reconocimiento", ha dicho.
Vivas no ha pasado por alto el parecido del Barrio de San Isidro con Ceuta, patente en sus calles empedradas y empinadas, en una plazoleta con un más que razonable parecido a la Plaza de África y en la que se atesora, entre otras cosas, al Cristo de Medinaceli. Se trata, en definitiva, ha comentado el presidente, de un barrio con un "encanto extraordinario". "Si en Algeciras nos sentimos como en casa, en San Isidro estamos doblemente en casa", ha apuntado el presidente de la Ciudad para terminar animando a todos los presentes que aún no la conocen a visitar Ceuta, un "modelo de convivencia" y una ciudad que "merece la pena".
El responsable de Relaciones Públicas de la Peña San Isidro, Felipe Mediavilla, ha agradecido al presidente Vivas su disponibilidad para asistir y participar en el acto de presentación de la trigésima primera Ortigada Popular de San Isidro, que es la segunda actividad gastronómica del Carnaval de la provincial de Cádiz, solo superada por la Erizada de la capital. En esa presentación se ha encuadrado la entrega de la Ortiga de Oro.
