La Ciudad ha retirado el amianto de los centros educativos en los que se sabía de su existencia. Se trata del Ortega y Gasset y del Federico García Lorca. Así lo ha reiterado el consejero de Educación y Cultura a preguntas de los periodistas durante un encuentro improvisado tras recibir a la Comisión Técnica de Actividades y Campos de Voluntariado Juvenil.
Retiradas las cubiertas de esos equipamientos, lo que se ha hecho es montar otras provisionales a la espera de que durante un periodo vacacional, para no afectar la actividad normal del centro, sean instaladas las definitivas.
Celaya no ha ocultado que, en el caso del Ortega y Gasset, esa cubierta provisional ha sufrido alguna filtración por la lluvia caída. “No ha sido gran cosa y se ha puesto en conocimiento de la empresa para que lo subsane”, ha completado.
“Amianto no queda, en principio y salvo que encontremos alguna sorpresa”, ha resumido el consejero de Educación y Cultura la situación de los centros educativos en cuanto a la presencia de ese material se refiere antes de desarrollar cuál sería la “sorpresa”: la existencia de una cubierta aislada de la que se haya perdido la memoria por haber sido aislada y recubierta, por ejemplo con planchas de hormigón u otro material que lo protegiera. En cualquier caso, Javier Celaya ha concretado que la peligrosidad del amianto radica en su manipulación y que, por fractura de una placa, pueda ser respirada la sustancia. “Tal y como estaba en los centros no era una amenaza absoluta, pero para mayor tranquilidad se ha ejecutado la obra de su retirada”, ha terminado.
