La Ciudad Autónoma ha decretado la retirada del servicio a cuatro taxis al presentar estos vehículos unas condiciones inadecuadas para el transporte de viajeros. Esta medida es la consecuencia de las inspecciones que están efectuando la Policía Local y el Parque Móvil de la Ciudad Autónoma dentro de una campaña en la que están implicadas la Consejería de Presidencia y Gobernación y la Vicepresidencia Primera de la Asamblea con la que se pretende la mejora de las condiciones de este servicio público.
La medida ha sido decretada en aplicación de la Ordenanza Reguladora del Servicio de Transporte Urbano de Viajeros en Automóviles Ligeros, donde se establece la obligatoriedad para los titulares de la licencia de que el coche presente unas buenas condiciones.
Esta campaña se está efectuando en una doble vertiente. Por un lado, a través de la Policía Local, con inspecciones a taxis en la vía pública. Y por otro, mediante el Parque Móvil, a través de citaciones.
En los cuatro casos antes mencionados se ha concluido que los vehículos estaban en una situación de "no apto para el servicio público", tal y como reza en los respectivos informes, tres de ellos emitidos por la Policía Local y el otro por parte del Parque Móvil.
Estos informes han motivado sendos decretos por los cuales los taxistas no podrán utilizar los vehículos para el transporte público, en tanto en cuanto no subsanen las deficiencias que han provocado esta suspensión. Cuando hagan las correspondientes reparaciones, deberán pasar una nueva inspección, esta vez del Parque Móvil, que determinará si el vehículo es ya apto para el servicio público. En el caso de que así sea, se levantará la orden de retirada y el vehículo podrá volver a ser utilizado para el transporte de viajeros.
La Ciudad Autónoma continuará con esta campaña de inspecciones con la que se busca que todos los taxis de Ceuta presenten las condiciones adecuadas para ser utilizados para el servicio público.