El Gobierno de la Ciudad ha reiterado hoy su profundo pesar por el accidente ocurrido en las instalaciones del puerto y que ha tenido como consecuencia el fallecimiento de un menor marroquí, un dramático hecho que confirma, ha dicho su portavoz, Jacob Hachuel, la posición que desde hace tiempo sostiene el Gobierno local de que el problema, por razón de su naturaleza migratoria, debe ser asumido por la Administración General del Estado.
Por ello, el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, va a solicitar reuniones, de manera urgente, con los ministros de Interior, Fernando Grande-Marlaska; Exteriores, Josep Borrell, y Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa, para abordar de manera monográfica la situación de los menores extranjeros no acompañados.
Para el Gobierno es fundamental intensificar los esfuerzos para evitar que los menores marroquíes no acompañados accedan a Ceuta por la frontera, procurar su retorno a Marruecos o su traslado a la península para su mejor atención, y así lo ha reiterado hoy, al término del Consejo de Gobierno Hachuel, quien ha considerado que no hay otra forma de solucionar el problema en Ceuta.
Para el Gobierno de la Ciudad se trata de un problema migratorio que se ve acentuado, en el caso de Ceuta, “por nuestra condición singular de frontera terrestre de Europa en África y porque la Ciudad carece de medios y recursos para dar una respuesta adecuada a esta presión”, ha dicho el consejero, que ha recordado que el Gobierno local, con su presidente a la cabeza, ha advertido en numerosas ocasiones cómo se ha agudizado el problema en los últimos meses, cuando se ha pasado de atender de 150 a 360 menores, “ un problema que desborda a Ceuta y que le corresponde al Estado solucionarlo, porque es un problema relacionado exclusivamente con la frontera y que desborda la capacidad de la Administración local y que nos ocupa y preocupa desde hace muchos meses”, ha matizado.
Por ello, el Ejecutivo local considera que la Administración General del Estado debe afrontar este asunto de varias formas, especialmente con más medios policiales, tanto en la frontera como en el puerto, para garantizar la seguridad en dicha infraestructura, de interés estratégico, no solo para Ceuta sino para toda España. Por otra parte, es imprescindible la implicación de las autoridades marroquíes en la atención a sus menores en situación de riesgo, una consideración que también ha puesto de manifiesto el portavoz del Gobierno, que se ha referido además que todo este planteamiento no es nuevo ni se ha iniciado a raíz del trágico accidente de ayer, sino que lleva meses gestándose en coordinación con el Gobierno de Melilla. Así lo demuestran no solo las numerosas reuniones mantenidas con el Ejecutivo de Juan José Imbroda sino también la iniciativa legislativa que fue aprobada por el Consejo de Gobierno la semana pasada y que será sometida al Pleno próximamente.
“Que nadie vaya a pensar que la Iniciativa Legislativa es consecuencia de que hemos tenido, desgraciadamente, un muerto”, afirmó el portavoz, “porque ya estaba planteada en el Consejo de Gobierno de la semana pasada y la defenderemos en el Pleno”. Mientras tanto, mientras las pretendidas reformas legales que se contemplan en la Iniciativa Legislativa se tramitan, “reiteramos nuestra petición de auxilio al Gobierno de la Nación para aumentar los efectivos policiales en la frontera y en el puerto a los efectos antes expresados; para que active todos los mecanismos que estén a su alcance para el retorno de los MENA a Marruecos o su traslado a la península y así disminuir de manera inmediata y drástica la presión existente e insoportable”.
La Ciudad intensificará la presencia de la Policía Local en el entorno portuario, pero insiste en que es necesario que la frontera “no sea tan permeable”. Además está prevista una reunión entre la Ciudad y la Autoridad Portuaria para tratar el blindaje del puerto, para el el que la Ciudad aportará 1,7 millones de euros.