El Consejo de Gobierno ha empezado a estudiar la reforma del Reglamento para la concesión de distinciones honoríficas con el propósito de simplificarlo. La idea es unificar una buena parte de los reconocimientos y premios existentes, que su entrega se celebre en una jornada y que sea la sociedad civil, en detrimento de las instituciones públicas y políticas, la que promueva quiénes merecen ser reconocidos.
Los objetivos finales son ahorrar, objetivar y realzar la celebración del Día de Ceuta, por ejemplo, si la entrega de todos o, al menos, parte de los galardones que la Ciudad concede cada año se lleva a cabo el 2 de septiembre.
En cuanto al ahorro, el portavoz del Gobierno, Guillermo Martínez, ha explicado que será posible al reducir el número de actos a organizar, pues cada evento de estas características conlleva gastos de personal, infraestructura técnica y otros, y al concentrar en una jornada varias entregas, se optimizarán todos esos recursos.
