El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, de visita hoy en Ceuta, han puesto de relieve el trabajo de la Guardia Civil en el control de la frontera sur de Europa, han coincidido en reclamar la implicación de la Unión en esa labor y en las consecuencias derivadas del hecho fronterizo, han cargado contra las mafias que trafican con personas y han lamentado el drama humano que existe alrededor de la inmigración irregular.
Vivas ha recibido al ministro en la Puerta Noble del Palacio de la Asamblea nada más llegar a Ceuta este mediodía. A continuación, han mantenido un encuentro en la Alcaldía Noble, en el que también ha estado el delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González Pérez. La siguiente parada ha sido en el perímetro fronterizo, que han recorrido para ver in situ el espacio custodiado por la Benemérita. Precisamente con los mandos del Instituto Armado han tenido un almuerzo de trabajo. Ya por la tarde, se han desplazado al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes y, tras esto, han comparecido ante los periodistas.
En esa rueda de prensa, el ministro ha explicado el motivo de su viaje a Ceuta hoy y, mañana, a la ciudad hermana de Melilla. "Como ministro tengo el deber de estar cerca de la Guardia Civil", ha dicho antes de criticar a quienes han cuestionado la "extraordinaria" labor de este Cuerpo y antes, también, de apelar a la responsabilidad y a la necesidad de abordar la inmigración como una "política europea, comunitaria y, por lo tanto, política de estado".
"Estamos contigo en la
defensa de la Guardia Civil, muy importante para los españoles y, especialmente, para los ceutíes", le había indicado en su alocución el presidente Vivas, quien ha destacado de la Benemérita su "compromiso, profesionalidad y sacrificio". "Y estamos contigo en que la defensa de la seguridad de las fronteras tiene que ser de toda Europa", ha afirmado el presidente, quien ha fundamentado esa aseveración recordando que España es el "recibidor" y Europa, "la casa común".
Una invitación "afortunada"
Por eso, al presidente le ha parecido "afortunada" la intervención del ministro esta semana ante la comisaria europea Cecilia Malmström, porque el asunto es "de todos" y porque el compromiso financiero para afrontar el control y el gasto derivado de la presión migratoria, "necesario". Como hizo el propio ministro después de su reunión con la comisaria, Vivas hoy la ha animado a visitar la ciudad para que pueda comprobar las consecuencias de ser "frontera entre dos mundos".
"Compartimos el dolor y el pesar que produce el drama humano de la inmigración irregular", ha señalado Vivas, quien ha arremetido contra las "mafias sin escrúpulos" que se aprovechan de esa situación de vulnerabilidad. "A España, a Ceuta y a la Guardia Civil nadie puede dar lecciones de actitud humanitaria ni capacidad de acogida", ha zanjado su defensa, como también ha defendido el ministro, de que es 
obligado velar por una frontera segura y sin tráficos ilegales.
El presidente de la Ciudad ha aprovechado para pedir a Fernández Díaz su apoyo en la petición cursada ante el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para actuar y regenerar el paso fronterizo y su zona de influencia.
El ministro del Interior: "Los ceutíes son ejemplo de respeto y acogida"
Durante su intervención, el ministro, que ha anunciado mejoras de medios humanos, materiales y de infraestructuras que redundarán en el control en El Tarajal y también en el paso de Benzú, ha tenido palabras de reconocimiento para los ceutíes en general, a quienes ha puesto como "ejemplo de respeto y
acogida"; y para la Policía Local en particular, por su colaboración con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado cuando la situación lo requiere, como ocurrió la madrugada del martes durante el intento de entrada en España por el Tarajal de 1.500 personas inmigrantes de forma irregular.
Jorge Fernández Díaz ha elogiado, también, el trabajo de la Policía Nacional y la colaboración de Marruecos, "el país vecino, amigo, socio y aliado".
