El Gobierno de la Ciudad mantiene su intención de llevar a cabo el proyecto de remodelación del Paseo de la Marina Española, pero ha decidido cambiar el procedimiento de adjudicación de la obra con el fin de que el precio sea el único criterio que pese a la hora de determinar la empresa que ejecutará los trabajos. De este modo, el Gobierno paraliza el concurso que había convocado para sacarlo de nuevo a licitación, esta vez por el procedimiento de subasta.
Con este cambio de criterio únicamente se pretende eliminar cualquier suspicacia en relación al cumplimiento de los principios básicos de la contratación administrativa. Esto no supone cambio alguno en relación a la calificación empresarial que se exige a los licitadores, ya que esta exigencia está justificada por la necesidad de garantizar, por parte de la Administración, la solvencia técnica del licitador. Así lo aconsejan los informes técnicos y jurídicos que se han emitido a raíz del recurso presentado por el grupo Caballas, y que han sustentado el informe de respuesta al recurso que hoy ha emitido la Gerencia de Infraestructuras y Urbanismo (GIUCE). El Gobierno ha comunicado su planes a la Federación Provcincial de Asociaciones de Vecinos en el trancurso de una reunión que ha estado encabezada por el presidente de la Ciudad, Juan Vivas.
El proyecto redactado y que salió a licitación no sufrirá variación alguna, de modo que se mantienen tanto las soluciones técnicas, como el propio presupuesto de licitación, fijado en 5,4 millones de euros, si bien el coste final de la obra vendrá determinado por la empresa que haga una menor oferta económica. En un principio, se estima que este cambio en el procedimiento de licitación conllevará un retraso en los plazos previstos inicialmente de tres semanas.
Con este proyecto se pretende convertir la necesidad (por sentencia judicial) de impermeabilizar el paseo en una oportunidad para solucionar cuestiones pendientes y para mejorar aspectos de relevancia. Así, se ampliará la acera sur, la situada junto a los edificios, para que cumpla la normativa y para revitalizar el comercio; se mejorará el tráfico, evitando dobles filas de vehículos; se renovarán las infraestructuras básicas, como la red de abastecimiento de agua que circula por debajo de esa misma acera, evitando las inundaciones de los locales con las lluvias; se fortalecerán los pilares que sostienen el paseo; y se mejorará la conexión y accesibilidad con las calles del entorno, además de mejorarse las condiciones de seguridad para los peatones. Además de todo esto, el Gobierno dará respuesta a las cuestiones suscitadas en estos últimos días en relación a la circulación de los vehículos de emergencia y las evacuaciones.