El Consejo de Gobierno ha aprobado rehacer el proyecto de La Marina para cumplir sin más dilación la orden judicial que obliga a impermeabilizar ese Paseo. El nuevo incluirá, además de esa impermeabilización, el reforzamiento de la estructura que sostiene el Paseo y la mejora de la accesibilidad con la calle Compañía del Mar por medio de una pasarela. Excluirá, por lo tanto, las obras para ensanchar la acera sur y reordenar el tráfico. El cambio hace variar tanto el plazo de ejecución, que será de entre siete y ocho meses, como el presupuesto, que se reducirá de forma sensible y que se dará a conocer una vez esté redactado el nuevo proyecto.
Con este cambio, el Gobierno quiere evitar la controversia jurídica que podría darse si, existiendo, como es el caso, una ejecución forzosa pendiente de cumplimiento, un juez pidiera la suspensión cautelar de la adjudicación de las obras al hilo de las observaciones que ha hecho el grupo de la oposición Caballas, referidas a supuestas alteraciones urbanísticas, del Plan Especial de la Almina y portuarias. "Estaríamos impedidos para ejecutar una sentencia y con una obra paralizada", ha resumido la consejera de Fomento, Susana Román, quien ha dado cuenta de la decisión adoptada por presidente y consejeros después de su reunión semanal.
"Las circunstancias mandan", ha subrayado la titular de Fomento en referencia a que existe una sentencia firme que obliga a ejecutar "sí o sí" la impermeabilización del Paseo. "Hay que darle cumplimiento", ha reiterado. Por eso el Gobierno opta por acometer las unidades de obra "no controvertidas por ningún técnico ni de dentro ni de fuera de la casa". "Hemos decidido que este era el mejor camino que se podía elegir", ha explicado la consejera, quien no descarta que en el futuro se pueda completar el nuevo proyecto con una segunda fase. "Lo dejo ahí, en el aire", ha dicho.
"Sigo diciendo y pensando que es necesario reordenar el tráfico y reorganizar la zona derecha del acerado, pero las circunstancias son las que mandan y hemos hecho lo que teníamos que hacer aunque no sea lo que nos manda el corazón", ha expuesto. "En estos momentos hay que tener la cabeza fría a pesar de que el corazón esté muy caliente y te diga otras cosas", ha terminado.