El Gobierno de la Ciudad ha intentado que los trabajadores de la Ciudad Autónoma con jornada especial y, por tanto, afectados en su salario por el incremento de la jornada laboral en las administraciones al que obliga la Ley de Presupuestos de 2012 no vean reducidas sus retribuciones. Para ello, el Ejecutivo ha planteado hoy a las centrales sindicales en una reunión la posibilidad de firmar un acuerdo que permita esta posibilidad, a través de adhesiones voluntarias e individuales.
Se trataría de materializar la oferta que el Gobierno ha puesto encima de la mesa desde el primer momento: crear una bolsa para servicios extraordinarios, con la que se compensaría la reducción a la mitad del exceso de jornada (de 5 a 2,5 horas, ya que el Estatuto de los Trabajadores impide hacer más de 40 horas semanales).
CC OO y CSIF han aceptado la propuesta del Gobierno, pero no así el sindicato mayoritario, UGT, por lo que la propuesta no podrá materializarse. Para que sea legal la adhesión voluntaria de los trabajadores afectados, la Administración necesita que haya un acuerdo con los sindicatos. El consejero de Hacienda, Economía y Recursos Humanos, Guillermo Martínez, ha asegurado no comprender la postura de UGT, sobre todo cuando esta propuesta no obligaba a nadie a hacer esos servicios extraordinarios (a cambio del 50% del complemento por jornada especial) y cuando más de 130 trabajadores han mostrado por escrito su conformidad en una recogida de firmas.
Como consecuencia de ello, los trabajadores con jornada especial –los servicios de museos, biblioteca, cementerios, guardería, Policía Local y el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento– a partir de la nómina de este verán reducido mes al 50% su complemento por esta jornada complementario, en torno a 160 euros, aunque el plus depende de la categoría del trabajador. En total, para las arcas municipales supondrá un ahorro de 600.000 euros, mientras que la oferta rebajaba esta cantidad a 200.000 euros. Estas cifras dan cuenta del esfuerzo que realizaba el Gobierno con la oferta planteada.
En un principio, el Ejecutivo había planteado un acuerdo para todos los trabajadores afectados, luego lo hizo por departamentos y ahora a través de adhesiones individuales y voluntarias, pero las tres posibilidades han sido rechazadas.