La Ciudad pagó en marzo en horas extraordinarias 4.653 euros, el 25% de lo que facturó durante el mismo periodo de tiempo del año pasado por el mismo concepto y el 5% de lo que supusieron las horas extras realizadas en marzo de 2010. Los datos ponen de relieve la política seguida por el Gobierno de la Ciudad en cuanto a la eficiencia de los servicios, que significa, como ha recordado el portavoz del Gobierno, Guillermo Martínez, hacer lo mismo con menos coste.
Estos números han salido a relucir durante la reunión semanal del Consejo de Gobierno, órgano que ha de convalidar las horas extraordinarias realizadas y que, el viernes 24 de agosto, hizo lo propio respecto del pasado marzo.
Entre los principios y prioridades de la gestión gubernamental están las medidas que tengan por objeto la eficacia y eficiencia en el funcionamiento de los servicios, además de la debida transparencia en la gestión económica y financiera y la consideración de que la austeridad en el gasto es un compromiso ético ineludible.
El Consejo autoriza una nueva negociación con los sindicatos
Por otra parte, el Consejo de Gobierno ha autorizado al consejero de Hacienda, Economía y Recursos Humanos a reabrir la negociación con las centrales sindicales sobre la ampliación de la jornada laboral a los empleados con jornada especial, razón por la que venían trabajando 40 horas a la semana.
Los sindicatos han pedido volver a negociar y el Gobierno atiende su petición autorizando para ello al consejero del área y manteniendo como cuestión irrenunciable, eso sí, el cumplimiento de la Ley de Presupuestos, que fija la jornada laboral en 37,5 horas semanales, de manera que quienes ya trabajaban 40, para no ver mermadas sus retribuciones, habrán de compensar esas 2,5 horas cubriendo servicios extraordinarios sin coste que ello conlleve coste alguno para la Ciudad.
La Ciudad, para ello, plantea la creación de una bolsa de horas con la que cubrir los servicios extraordinarios que requieren celebraciones como la feria, las diferentes cabalgatas, las fiestas musulmanas, el día de la mochila, San Antonio y la carrera de San Silvestre o como, por ejemplo, los retenes de bomberos en los montes en la temporada estival. En definitiva, se trata de que las horas cobradas y no realizadas mes a mes pasen a esa bolsa con la que la Ciudad irá haciendo frente a esos servicios especiales.
"Si no hay acuerdo en esos términos, seguimos como estamos", ha comentado el consejero y portavoz del Gobierno en relación a la reducción en las retribuciones de los afectados, en cuyas nóminas de agosto verán descontadas 2,5 horas semanales que venían prestando dentro de la jornada especial y que ahora forman parte de la jornada laboral ordinaria, conforme la Ley de Presupuestos Generales del Estado.
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