El Consejo de Gobierno ha aprobado el Reglamento de gestión y explotación del bingo electrónico, con el que el Ejecutivo persigue abrir nuevas oportunidades para las empresas del sector y rebajar la presión fiscal.
Al carecer de potestad legislativa, Ceuta se rige por una norma de 1958 que grava tanto la venta de cartones como los premios, mientras que la mayoría de las comunidades autónomas han aprobado leyes para cambiar este escenario y rebajar los impuestos. Estos mismos pasos da ahora el Gobierno de Ceuta con el fin de que las empresas de Ceuta no estén sometidas a una fiscalidad mayor.
"Vamos a incorporarnos a esta dinámica para dar más opciones al sector y contribuir al mantenimiento del empleo en una actividad, que como toda la relacionada con el ocio, se encuentra especialmente afectada por la situación económica", explicó el portavoz y consejero de Hacienda, Economía y Recursos Humanos, Guillermo Martínez.
Para la entrada en vigor del Reglamento, en primer lugar el Consejo de Estado debe dar su visto bueno al texto y posteriormente someterse a la aprobación del Pleno de la Asamblea.