El Consejo de Gobierno ha autorizado la firma de los convenios que sostienen la actividad de las asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFA), para la Lucha contra las Enfermedades del Riñón (ALCER) y de Familias de Personas Sordociegas, con Discapacidad Sensorial y Carencias de Comunicación (APASCIDE), las tres, integrantes del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). En total, suman más de 393.000 euros de presupuesto, emplean a 18 personas y tienen cerca de 300 beneficiarios directos.
El convenio que la Consejería de Asuntos Sociales e Igualdad firmará con AFA tiene un presupuesto de 188.062 euros, da trabajo a 9 personas y suma 180 beneficiarios directos de los programas que desarrolla esa entidad para mejorar la calidad de vida del enfermo de Alzheimer u otras demencias, así como del apoyo que presta a sus familias o cuidadores. Además, la colaboración implica también la cobertura del funcionamiento interno de la asociación y el desarrollo de talleres de estimulación cognitiva, terapias ocupacionales, fisioterapia e hipoterapia. Apoyo psicológico, ayuda a domicilio, formación a cuidadores y asesoramiento jurídico son otras de las prestaciones que sustenta este convenio.
El de ALCER, que tiene 95.253 euros de presupuesto, tres trabajadores y 90 beneficiarios, persigue mejorar la calidad de vida del enfermo renal y su integración social así como apoyar a sus familias y, para conseguirlo, contiene actividades de orientación y respiro familiar, acciones de sensibilización y concienciación de la importancia de donar órganos y educación nutricional.
En cuanto al convenio que Asuntos Sociales suscribirá con APASCIDE por 109.910 euros de presupuesto, los seis trabajadores que emplea se afanarán en actividades de integración social con las que coadyuvar a la mejora de las condiciones integrales de las personas que padecen sordoceguera y de sus familiares. Lo llenan de contenido acciones de estimulación del lenguaje y psicomotriz, atención psicológica, fisioterapia, servicios de intérprete, atención a las necesidades educativas especiales y actividades sobre habilidades útiles para la vida diaria. De todo esto se benefician de forma directa 18 personas e indirectamente otras 115.
