El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha aprovechado su intervención en la videoconferencia semanal que convoca el presidente del Gobierno cada domingo para anunciar a Pedro Sánchez que el Gobierno de Ceuta se seguirá haciendo cargo, hasta el límite de su disponibilidad presupuestaria, de los ciudadanos marroquíes que quedaron atrapados en la ciudad tras el cierre de la frontera en marzo y que aún no han podido regresar a su país, así como de los marroquíes que se han negado a ser repatriados.
La consecuencia más significativa de ello es que el 100 % de la asignación que Ceuta recibió del Fondo Social de 300 millones de euros, y que asciende a 1,6 millones, se ha destinado a atender cuestiones relacionadas con inmigración, extranjería y frontera.
La Ciudad ha previsto que el cierre ordenado del pabellón polideportivo de La Libertad se produzca el próximo martes, día 2 de junio, con el traslado de los ciudadanos marroquíes que allí quedan hasta la nave del Tarajal, cuyo acondicionamiento se está ultimando, y donde serán atendidos hasta que puedan ser repatriados.
Juan Vivas también ha expresado su preocupación e inquietud por el repunte de casos de COVID-19 que se ha producido en Ceuta durante la última semana, si bien también ha subrayado que el brote está relacionado con dos hechos puntuales perfectamente localizados y que se han activado de manera inmediata los protocolos y mecanismos para el control y seguimiento de los afectados.
El presidente ha querido dejar constancia en la videoconferencia de la profesionalidad y entrega del personal de la Consejería de Sanidad dedicado a esta tarea, trabajadores “que están dando lo mejor de sí mismos para luchar contra la epidemia, con un sentido del deber y una vocación de servicio admirable y que son un verdadero ejemplo para todos”.
Vivas ha apelado al compromiso de los ciudadanos para que, durante este proceso de desescalada en el que está inmersa la ciudad, se comporten y actúen de manera responsable, evitando conductas que puedan poner en riesgo la salud de toda la población. En cualquier caso, el presidente ceutí ha querido dejar claro que, aunque ha sido una semana negativa, en lo que a la evolución de la pandemia en Ceuta se refiere (se han multiplicado por tres los casos activos en apenas siete días), la ciudad sigue sin tener una presión hospitalaria relevante porque las tasas, tanto en ingresos como en mortalidad, se sitúan entre las más bajas de España, y es especialmente relevante que no haya fallecimientos ni pacientes por COVID-19 ocupando camas de UCI desde principios de abril.
Al margen de la evolución de la crisis sanitaria en Ceuta, el presidente de la Ciudad ha solicitado una reunión telemática con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, o con la secretaria de Estado de Hacienda, Inés Bardón, para abordar en un encuentro bilateral, al que podría sumarse Melilla, para atender las cuestiones pendientes de ambas ciudades en cuanto a transferencias no abonadas y a las dudas en torno a los criterios de reparto del fondo extraordinario de 16.000 millones de euros, para que, en la medida de lo posible, clarificar el escenario presupuestario de este ejercicio.
Igualmente, el presidente ha pedido que, ante cualquier decisión que se tome sobre la Operación Paso del Estrecho o sobre la reapertura de la frontera del Tarajal se le de audiencia al Gobierno de la Ciudad.
