El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha renovado hoy, ante la imagen de la Patrona, el voto de agradecimiento de los ceutíes a la Patrona, una tradición que se remonta a 1651, y que en esta ocasión ha estado condicionada por la situación sanitaria.
El acto se ha iniciado con una celebración eucarística con motivo del agradecimiento de la Ciudad a la Virgen, a cuyo término el presidente ha realizado el voto, leyendo la fórmula tradicional y precedida de una petición expresa a la Virgen de “fuerza y valor” para quienes dan lo mejor de sí en el empeño de cuidar la vida y salud de los demás; “apoyo y ayuda” para quienes han perdido su sustento y también “para los que luchan contra viento y marea por no perderlo”.
Durante el acto, que se ha celebrado en el Santuario de Nuestra Señora de África y ante un número muy limitado de personas (diputados de la Asamblea y miembros de la Cofradía, sobre todo), el presidente ha reiterado su petición a la Virgen de África para que ayude a Ceuta a “caminar por la senda de la honestidad y la decencia; de promover el bien común y la justicia; de atender a los más necesitados y vulnerables; de fomentar la concordia, el respeto y la convivencia entre todos los ceutíes”.
“Desde hace casi un año atravesamos un difícil trance marcado por el llanto y el dolor, por la tristeza, la desolación y el quebranto”, ha continuado Vivas. “Por eso, nuestra plegaria, nuestra petición de protección y amparo, de este 9 de febrero, tiene que ser especial. Por eso te pedimos, querida Madre y Patrona, paz y descanso para las víctimas mortales de esta terrible epidemia y consuelo para sus seres queridos”, ha añadido para desear esperanza con la que “afrontar con determinación y perseverancia” el reto, “sin margen para el abatimiento”. “La empresa es difícil, muy difícil, pero también es una oportunidad para sentar las bases de un futuro mejor para nuestra tierra”, ha considerado para apelar de nuevo a la unidad, a dejar a un lado “las diferencias en lo accesorio para coincidir en lo fundamental, de actuar unidos al servicio de la causa común, de ser generosos a la hora de ceder, y estoy convencido de que se puede conseguir”.
“Lo podemos hacer, tenemos la obligación de hacerlo por amor a esta tierra y a España; el amor que tu presencia entre nosotros desde hace más de 600 años simboliza; el amor que todo lo puede y alcanza; el punto de apoyo que mueve el mundo y nuestras voluntades; la fuerza para la que no existen metas inalcanzables ni sueños imposibles”, ha concluido Vivas, que al término del acto ha subido al camarín de la Virgen a realizar la ofrenda floral.
El voto de gracia se remonta a 1651, cuando el conde de Torres Vedrás lo hizo para agradecer que la epidemia de peste que asoló el occidente europeo no afectó a Ceuta. Desde aquel año, este acto “recuerda la protección que ha dispensado, dispensa y dispensará a Ceuta y a sus habitantes” Santa María de África, tal y como se recoge en la fórmula tradicional del Voto que Juan Vivas, en su condición de alcalde, pronunciará esta tarde ante la Patrona. Esta tradición luiego la continuó por el Marqués de Campo Fuerte en 1743, el Ayuntamiento en 1937 y a partir de 1996 la Asamblea de la Ciudad, reconociendo “los favores recibidos de la Divina Providencia, por la intercesión de su Santísima Madre, a la que veneramos con el título de Nuestra Señora de África“.