El Salón del Trono del Palacio de la Asamblea ha albergado un acto conjunto de Ciudad y Delegación en conmemoración del trigésimo séptimo aniversario de la Constitución, una celebración que transmite “lealtad institucional y lealtad al interés general, al servicio público y a la Constitución para respetarla y acatarla”, ha expresado el presidente, Juan Vivas. Como es habitual, Ciudad y Delegación han dedicado la conmemoración que conjuntamente han brindado a la Carta Magna y, este 2015, esa dedicatoria ha sido para el movimiento de voluntariado, representado por 16 personas voluntarias en distintos ámbitos de acción. Vivas ha tenido palabras de reconocimiento para ellos, ha ensalzado la figura de los españoles que hicieron posible la Norma Fundamental del Estado en pro de la modernidad y sin echar la vista atrás, ha apostado por lograr, "juntos", consolidar un modelo económico y productivo que reporte buenos niveles de empleo y ha apelado a la unidad de España como pilar fundamental de la Constitución.
Vivas ha iniciado su intervención recordando algunas de las “muchas cosas” ocurridas, significativas o representativas de 1978, año en que, poco antes de acabar, los españoles refrendaron la Ley de leyes: desde la movida madrileña, hasta Los ángeles de Charlie pasando por Cañas y barro, el estilo Travolta, el Óscar al Expreso de medianoche, el éxito de Warren Beatty en El cielo puede esperar, la representación de José Vélez de España en Eurovisión con aquel Bailemos un vals, la pérdida de Santiago Bernabeu, la entrada de Carmen Conde en la Real Academia Española, que supuso la entrada de la mujer en la RAE... “Era un año en que un café costaba cuatro pesetas y el 127 poblaba las carreteras”, ha compartido el presidente. “Los que tenemos cierta edad debemos ser conscientes de que veinte millones de españoles no lo recuerdan porque no lo vivieron o eran muy pequeños, pero todos podemos celebrar que cuando [1978] estaba a punto de terminar, los españoles refrendaron el hito político y social más importante de nuestra historia democrática, la piedra angular de un camino hacia la modernidad, la democracia, la libertad”, ha continuado.
Y a partir de ahí, el presidente de la Ciudad se ha ahondado en aquel “tránsito” que, siendo todo “mejorable”, fue “provechoso y beneficioso”.
Lo primero, por lo que zanjaba, que era, en palabras del presidente, “esa aparente irresoluble división de las dos Españas que Goya retrató en Duelo a garrotazos o La riña, la que describió Antonio Machado y que [Joan Manuel] Serrat elevó a la categoría de himno; se zanjaba una crónica negra de exilio, paredón... y un enfrentamiento secular de los españoles por la religión, el derecho a la propiedad, la forma de gobierno…”
Lo segundo, beneficioso, por lo que alumbraba, que era, ha dicho Vivas, “un porvenir de progreso y bienestar, un salto cualitativo y cuantitativo como nunca antes había conocido España en todos los órdenes, en los niveles de vida y protección social, en los servicios básicos, en la igualdad entre hombres y mujeres, en la atención a los más vulnerables, en las comunicaciones, la organización y equipamiento de las ciudades…”
“Este proceso contó con líderes de extraordinaria talla, pero el protagonismo lo tuvo la sociedad española del momento, como siempre en las grandes ocasiones, una sociedad que eligió el camino de la reconciliación; y eso que parece una palabra era una actitud muy importante, porque era la actitud de conquistar el futuro sin poner espejos retrovisores, sin mirar hacia atrás, sin abrir heridas que estaban cicatrizadas, sin pasar factura a nadie, sin resentimientos, sin lastres del pasado”, ha reconocido Vivas. “Creo que esa fue una actitud ejemplar”, ha rematado.
“Los que tenemos cierta edad y lo vivimos debemos reconocer aquello y no debemos olvidarnos de nuestros padres”, ha proseguido. “Heredaron una España difícil, las dramáticas consecuencias de una guerra fratricida y de una autarquía imposible, y con sudor, esfuerzo y sacrificio salvaron a España del hambre, de la penuria, del remiendo para casi todo: los trajes, los pantalones, los zapatos... todo se remendaba”, ha recordado antes de completar: “Nos formaron, nos educaron en valores, crearon las condiciones para que aquella sociedad del 78 eligiera la libertad sin ira; no sería justo que lo olvidáramos, que lo eclipsáramos”, ha recomendado para, a continuación, explicar el porqué: “Sin ellos hubiera sido imposible”.
“Y con la edad, llego a la conclusión de que no hemos sido mejores que nuestros padres”, ha hilvanado el presidente aquellos méritos con otros posteriores. “Hemos superado muchas pruebas y hecho mucho: la integración en la Europa del desarrollo y de la moneda única, la superación de varias crisis económicas de importancia al inicio y al final; hemos ganado la batalla a ETA, que ha dejado muchas víctimas en el camino”, ha repasado el presidente de la Ciudad, quien ha proclamado “memoria, dignidad, justicia” y un recuerdo “permanente” para todas ellas.
“Juntos nos quedan muchas cosas por hacer y soy optimista”, ha enlazado. “Tenemos una sociedad sólida, consistente, solvente y vamos a conseguir y consolidar un modelo económico y productivo que, en condiciones de estabilidad, nos reporte niveles de empleo y ocupación equiparables a los de las naciones más desarrolladas de nuestro entorno”, ha augurado. “De ello depende el mantenimiento del Estado del Bienestar, los servicios y las prestaciones sociales básicas”, ha subrayado. “Juntos ofreceremos a la juventud los nuevos horizontes y oportunidades que demanda y venceremos esa nueva amenaza del terrorismo yihadista”, ha añadido.
“Hemos construido un edificio sólido y duradero, pero no indestructible”, ha avisado Juan Vivas, para quien “los riesgos, los peligros, acechan y son evidentes”. “Tenemos la obligación de preservar los cimientos de este edificio y, entre ellos, el pilar fundamental: la unidad de España, que no está reñida con el aprecio a la diversidad”, ha considerado.
“Esta España nuestra es como un árbol más que centenario, de raíces profundas, con un tronco resistente y con muchas ramas diversas, distintas en formas y tamaños, pero todas necesarias, queridas e imprescindibles”, ha descrito para insistir en la defensa de la unidad del país: “Juntos tenemos que defender la unidad de España, el principal atributo, juntos y al amparo de la ley tenemos que defender nuestra provechosa unidad”.
El jefe del Gobierno de Ceuta ha tenido palabras de felicitación para el voluntariado, que celebra el 5 de diciembre su Día Internacional y al que ha considerado “apropiado” dedicar el acto institucional de Ciudad y Delegación en torno al XXXVII Aniversario de la Constitución porque voluntarios y Carta Magna están “íntimamente” relacionados. “Sin los voluntarios sería hoy prácticamente imposible mantener con niveles de eficacia esa aspiración y principio que establece la Constitución en su artículo 9 de igualdad plena, efectiva y real entre todos los grupos e individuos”, ha reconocido. “Para eso, los voluntarios sois fundamentales; y de mucha categoría en cuanto a los fines que os motivan”, ha subrayado Vivas para explayarse sobre esos objetivos.
“Voluntarios para atender la dependencia, la discapacidad, la pobreza, la exclusión social, la donación sangre y órganos, la protección civil, el medioambiente, la paz y la concordia, para luchar contra la violencia, la intransigencia, la xenofobia y el racismo”, ha relacionado los distintos ámbitos en que los voluntarios se vuelcan en pro de una sociedad más justa. “Gracias de todos corazón por el compromiso, síntoma de madurez cívica, y la actitud, un ejemplo a seguir”, les ha elogiado.
“La edad reporta experiencia y a mí me dice que, en las acciones humanitarias, lo recursos son importantes, muy importantes, pero la experiencia también me dice que lo que es insustituible, sobresaliente, es la pasión que se pone en lo que uno hace, el cariño que uno le tiene a quien es destinatario de lo que hace”, ha ensalzado su labor. “Gracias y a seguir dando ejemplo”, les ha dicho.
Los últimos minutos de la intervención del presidente han estado dedicados a Ceuta. “Si en el conjunto de España hay un lugar donde se pongan de manifiesto de manera cotidiana algunos de los más significados valores de la Constitución, ese lugar es Ceuta”, ha afirmado. “Aquí, el valor de la solidaridad como elemento insustituible para compensar las dificultades por los distintos condicionamientos, por lo tanto, como elemento imprescindible para que todos los españoles seamos iguales con independencia de cuál sea el lugar de residencia; aquí, el imperio de la ley como garantía para una convivencia en paz, armonía e igualdad con independencia de razas, credos o formas de pensar; y aquí, el patriotismo como espíritu para servir y defender a España para lo que sea menester y a cualquier precio, como sentimiento para proclamar, cada vez que sea necesario y lo propicie la ocasión, nuestro amor a la patria y el orgullo de ser españoles”, ha desarrollado y ha terminado con tres vivas: a España, a la Constitución y al Rey.
El homenaje que Ciudad y Delegación han brindado a la Constitución ha comenzado en su Plaza, donde se haya el monumento que rinde tributo a la Ley de leyes. Allí, el presidente Vivas, el delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, y el comandante general, Sancho Sifre, han participado en una ofrenda floral.