La Ciudad comunicará con un puente atirantando para tráfico rodado y peatones sobre la vaguada de Arroyo Paneque la avenida de Otero y los Grupos del Rocío, proyecto que contempla, además, una actuación integral de las vías de ese ámbito de actuación, desde la intersección con la avenida, que se resolverá con una rotonda, hasta el final de la calle Rafael Borrego, la de esa barriada.
La Consejería de Presidencia y Relaciones Institucionales ha dado cuenta hoy al Consejo de Gobierno del encargo a Tragsa de la ejecución de este proyecto, de la Oficina de Control y Supervisión de Proyectos (OCISPE) de la Ciudad.
El Gobierno dedicará a esta mejora de la comunicación urbana una inversión de 8.684.530 euros y el plazo de ejecución de la obra es de 24 meses a contar desde la firma del acta de inicio, trámite que podrá cumplirse en fechas próximas.
Cabe destacar que la inclusión en la red viaria de este puente urbano rodado y peatonal que conectará la Avenida Otero y los Grupos del Rocío cruzando sobre el Arroyo Paneque conlleva una mejora de la comunicación de las barriadas a ambos lados de la vaguada con el Centro de Salud de Otero.
En lo que al trazado se refiere, el proyecto establece un eje longitudinal en consideración a los puntos de conexión con la red viaria en la avenida Otero y la calle Rafael Borrego y el marco de ajuste viene determinado por la situación de la Residencia del Comandante General y del propio centro de salud.
La elección de la tipología de puente atirantado, con mástil inclinado y en posición adelantada, como reza el proyecto, permite una afección mínima de terrenos con interés arqueológico, ya que concentra la cimentación en el otro extremo. Además, al no ubicar apenas elementos en la vaguada, la interferencia en futuros desarrollos urbanísticos, como prevé el planeamiento, queda minimizada.
De acuerdo con el proyecto, en el tronco del puente se dispone una calzada por sentido con carriles de 3,50 metros de ancho cada uno, sin arcenes; entre ambos lados se contempla una mediana de un metro de anchura; y en los lados exteriores del conjunto se establecen los itinerarios peatonales con espacio suficiente, no inferior a los 2,40 metros, para instalar aquellos elementos que sean necesarios.
Por lo demás, esta solución ayuda a mantener un paisaje urbano singular y a establecer una imagen de conjunto con un elemento con suficiente presencia, como es el puente atirantado.
Respecto de los trabajos a acometer, se incluyen diferentes desmontes y contenciones de terrenos, la propia ejecución de la estructura del puente, la reforma de los viales existentes y elementos derivados (firmes, acerados, instalaciones urbanas, mobiliario, jardinería y alumbrado) y la construcción de una rotonda por el extremo de la Avenida Otero.
