Proveniente de la financiación de los Fondos FEDER, la Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos prevé dedicar 3,5 millones para actuaciones de reforestación tras el grave incendio del pasado año en García Aldave. Unas actuaciones, que ha precisado el consejero Alejandro Ramírez este lunes en el Pleno, no podrán comenzar hasta pasados dos años, como mínimo, de lo sucedido, puesto que es preciso que el terreno se regenere.
En cualquier caso, Ramírez también ha explicado que los técnicos ya han realizado la valoración del proyecto, cuyo expediente se dejará preparado y encargado con la fecha de inicio condicionada a 2024.
Al margen de esta actuación de envergadura, en los últimos cuatro años la empresa pública Obimasa ha ejecutado distintos trabajos de reforestación, entre ellos, la eliminación del arbolado muerto; la plantación de 3.000 ejemplares de plantones de planta autóctona en el Hacho, o la restauración vegetal del monte de Aranguren, donde se han plantado 50 ejemplares de distintas especies como alcornoques, madroños, acebuches o quejigos.
Asimismo, desde agosto se han efectuado tareas de restauración en Isabel II y del barranco del Topete a través de un encargo a Tragsa por importe de 200.000 euros.
Además, hay otra actuación, por similar importe, relativa a la regeneración de la zona afectada por incendios forestales en la Red-Natura 2000 y arroyo de Calamocarro. Las tareas no han podido iniciarse ante la necesidad de respetar los periodos de reproducción y crianza de aves, pero ya han sido iniciadas este octubre.
Conservación de los parques infantiles
En otro orden de cosas, el consejero de Servicios Urbanos también ha adelantado este lunes en el Pleno que el departamento que lidera va a licitar un contrato, por dos anualidades a razón de 600.000 euros cada una de ellas, para externalizar el mantenimiento, conservación y mejora de los parques infantiles, que actualmente ascienden a 39. Una cifra que, ha avanzado, podría aumentar hasta 45 con el objetivo de atender las demandas vecinales.