El presidente de la Ciudad ha explicado hoy al ministro del Interior la situación que sufre Ceuta en relación con los menores marroquíes no acompañados y le ha pedido socorro ante una realidad insoportable, extraordinaria y sin parangón en el resto de España, salvo el caso de Melilla. “No es ninguna exageración: en un año el número de ingresos en el centro de acogida se ha multiplicado por 5 y la estancia media en el mismo ha crecido en más de un 90 %”, ha descrito con datos el jefe del Gobierno de Ceuta.
Vivas ha desarrollado las “muy graves” consecuencias de esa situación. Una es que la capacidad del centro de acogida está sobrepasada un 400 % desde septiembre, lo que acarrea que no se puede atender debidamente las necesidades de los menores ceutíes en desamparo. Otra, que en el Puerto y sus inmediaciones hay continuos intentos de cruzar el Estrecho como polizones -el riesgo para su integridad lo evidencian las dos muertes registradas en apenas diez meses-, se cometen actos que provocan inseguridad y existen mafias dedicadas a la explotación de menores. La tercera, la preocupación e intranquilidad de la ciudadanía.
Ante todo esto, Vivas ha pedido socorro al ministro Grande-Marlaska, de visita hoy en Ceuta. De forma concreta, el presidente ha demandado las medidas necesarias para que los menores migrantes sean retornados a Marruecos y, si no es posible, a la península; más policías y guardias civiles para intensificar los controles de acceso de menores en la frontera del Tarajal y mejorar las condiciones de seguridad en el puerto; y blindar esta instalación para, de esa forma, evitar su efecto llamada de quienes quiere cruzar el Estrecho, actuación en la que la Ciudad está dispuesta a colaborar.
Si bien esto son actuaciones de emergencia, el presidente no ha pasado por alto que el problema es de naturaleza estructural, pues está asociado a la presión migratoria y a la singular situación fronteriza de Ceuta. Y ante un problema de naturaleza estructural, ha requerido medidas estructurales que eviten que Ceuta se convierta en un macrocontenedor para la retención de migrantes, ya sean adultos o menores; y que impidan que la verdadera frontera para los migrantes marroquíes, adultos y menores, y argelinos esté en el puerto en vez de en el Tarajal.
El presidente se ha mostrado satisfecho por la receptividad encontrada en el ministro Grande-Marlaska, quien a su paso por el Palacio de la Asamblea ha firmado en el Libro de Honor de la Ciudad, en el que ha dejado constancia de sus mejores deseos para esta ciudad con estas palabras: “Es un auténtico lujo, un verdadero honor, firmar de nuevo en vuestro libro. En esta ocasión como ministro del Interior del Gobierno de España. Vuelvo a agradecer vuestro trabajo y la lealtad de todos los ciudadanos de Ceuta a nuestro proyecto en común: una España plural, diversa, solidaria, conocedora de su pasado y con ganas de seguir afrontando el futuro.
Deseo que siempre tengamos un momento que compartir y vuelvo a reiterar mi compromiso con Ceuta, que es tanto como decir mi compromiso con España. Lo mejor para Ceuta.”
